sábado, 28 de junio de 2014

Despidiendo tu silencio...




"Se despidieron y en el adiós ya estaba la bienvenida"
Mario Benedetti

Quizás tenía que llegar este sábado... uno de sueño, lluvia y una extraña tristeza que está escondida en alguna parte... te has ido aunque me resisto a darme cuenta de que es verdad de verdad... que ya no estás, que ya no voy a verte, es un mantra que debo repetirme día a día desde hace unas semanas... no llegué a tiempo de decirte adiós... quizás porque lo hice aunque tú no lo supieras cuando todavía sonreías, cuando todavía podías decirme "te quiero" con esa ternura tan tuya... dos palabras que tantas, tantas veces nos hemos repetido el uno al otro durante estos meses y durante toda la vida... te mentimos, te mentimos mucho... te ocultamos la realidad, esa jodida verdad de que la vida se te escapaba día a día... que ese silencio en el que tú vivías por ruidoso que lo hiciéramos los demás iba a llegar al "para siempre" antes que después... te mentimos sabiendo que lo hacíamos... procurando por todos los medios que con quirófanos, con quimios, sin fuerzas no supieras que nos ibas a dejar solos... que ibas a faltarnos en este extraño universo que construyen alrededor pedacitos de personas a las que queremos y que nos resultan fundamentales para vivir... que nos enseñan a hacerlo... pedacitos que se quedan con nosotros para siempre como parte de quienes somos...

Sé que ya no estás y, sin embargo, me resulta imposible hacerme a la idea... quizás porque creo que cualquier otro día vamos a ver un partido juntos solo por el hecho de que a ti te apasionaba el fútbol y tenerme como compañía... me resisto a pensar que no vas a volver a reírte con todas las estupideces y payasadas que toda nuestra vida te han hecho tanta gracia... esas a las que solías corresponder con aparente desaprobación sonreída y reída acompañada de ese "muy graciosita" tan del abuelito... con esa manera tuya de reírte, llena de una increíble inocencia que te achinaba los ojos... invadí muchas veces tu silencio, ese que obligaba a hablarte mirándote a la cara... ese maravilloso silencio que permitía decirte cualquier cosa solo moviendo los labios sin que nadie más supiera lo que decía... sin que nadie más que tú y yo entendiera por qué nos estábamos riendo... 

Te has ido y sigo sin darme cuenta... sin entender quién va a grabar ahora todas las series habidas y por haber de la tele, quien va a pedir siempre y en cualquier parte algo tan peculiar como un Trinaranjus de naranja... quién va a pensar en hacer mi ajuar guardando puntos para unas sartenes, quién me va a preguntar como sólo lo hacia la mami cómo está mi amor... solo hoy logro llorarte de verdad dándome cuenta de que no estás... una ausencia que deja atrás muchas, muchas cosas maravillosas... mucho amor... el mismo amor que todos te dimos a ti mientras te marchabas... el mismo que nos diste tú manteniendo siempre esa increíble serenidad que hacía que fueras todavía más especial de lo que ya eras... 

Soy afortunada y lo sé... pocas veces en la vida uno se encuentra tanto amor del de verdad... quizás, por eso, el "para siempre" tenía que ser más breve...

Una última canción... una demostración más de mucho amor que llegó en una maleta desde Londres para romper tu silencio y hacerte uno de los regalos más grandes... escalera al cielo, curioso título para el momento... mejor descubrimiento saber que era tu canción favorita...



Foto | facimadevilla en Instagram
Vídeo | Jonhatan Izpael