martes, 2 de diciembre de 2008

He dejado de creer

“El amor es una estupidez realizada por dos”
Napoleón Bonaparte


Últimamente, lo tengo que reconocer, vivo en una extraña situación dividida… los acontecimientos me hacen dudar de algo que jamás creí que dudaría… creo que me hago mayor y, por ende, me estoy convirtiendo en un ser descreído… lo tengo que reconocer: pese a todo y por primera vez en mi vida, no creo en el amor… no creo en esa extraña unión que hace que dos personas se miren de manera distinta… no creo en ese compromiso absoluto… no, no creo que el amor como tal exista… lástima… siempre pensé que era lo que hacía que la vida valiera la pena…

Si me paro a analizar mi alrededor, la cosa no mejora demasiado… parejas de esas irrompibles que se entienden y se quieren, de golpe y porrazo, se van a la mierda… escucho a mis amigas comentar lo difícil que es encontrar a alguien que, de verdad, te despierte un sentimiento real más allá de la mera compañía… escucho las historias de unos y otros… y me pregunto si es todo tan complicado o realmente el ser humano ha decidido complicarse la vida más de lo que ya es… no lo sé, tampoco tengo esa respuesta… pero me doy cuenta de que esta, mi generación, sufre una terrible enfermedad… la del desengaño, la desilusión, la falta de compromiso… sí, hemos ganado libertad… pero también hemos perdido confianza… maravillosa palabra… tan difícil de conseguir y tan sencilla de perder… ninguna historia es un jardín de flores, y tampoco creo que el amor tenga que serlo… pero me paro a pensar, a observar lo que me rodea… y me doy cuenta… no sé hacia donde caminamos pero lo que es seguro es que lo hacemos de manera individual… creer en el amor es como creer en Dios… algo que pasa, o no… creo que yo, como mucha gente de mi generación, hemos perdido simplemente la fe… amigas que buscan sin encontrar, amigos que encuentran sin buscar… es un juego tan complicado… y lo peor es que, como todo lo peligroso, deja unas cicatrices tan profundas que es difícil curarlas… esto no mata, está claro… pero sí es cierto que te cambia la manera de mirar el mundo… perdemos inocencia, quizás… lo único maravilloso que conservamos de la infancia… lo reconozco: he dejado de escuchar a Sabina... me resulta demasiado realista su planteamiento...

Os aseguro que no trato de ser pesimista, no lo siento así… quizás por primera vez en mi vida soy realista respecto a este tema… supongo que porque ya nada es tan sencillo, porque lo convertimos todo en algo demasiado complicado… menos mal que todavía sigo viendo ejemplos de eso en lo que creía… ejemplos de personas que hacen por entenderse, que se necesitan sin que eso sea algo negativo… personas que saben que el otro es el puntal de su vida… vidas separadas pero juntas… como las vías de un tren… nada avanza si una de ellas se sale del camino…

Encontrar o no encontrar, he ahí el dilema… la verdad, no lo busco… no lo pretendo… y, sobre todo, no lo quiero… ahora mismo, soy yo… sin más… y supongo que por eso también he dejado de creer… porque ¿para qué profesar fe a algo que, quizás, no existe?... hablamos idiomas distintos, hombres y mujeres… y mientras no superemos esa barrera, el mundo seguirá siendo un lugar extraño en el que habitar… será que me hago mayor, quien sabe… pero ahora me doy cuenta de que las relaciones humanas son difíciles… que sentir es una odisea cuando no encuentras ni con qué ni con quién… y lo más curioso… el ser humano se reinventa… modificamos nuestra escala de valores, de sentimientos… sin darnos cuenta, sin apenas percibirlo… y, un buen día, nada es como creíamos... nada... sabemos que nos falta algo en nuestra vida, pero ¿para qué?... huímos de ello... es más sencillo... meter la cabeza bajo la tierra... nos privamos de que nos hagan daño, pero también de sentir... somos egoístas, orgullosos, individualistas... lo siento, en un planteamiento así no tiene cabida el amor...

¿Nos hace más libres o más prisioneros?

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Lo bonito de todo esto es descubrir y dedicarle más tiempo a otros tipos de amor, de esos que no caducan con el fin de la pasión.
Supongo que todo, por malo que pueda parecer, tiene su parte positiva.

Tú eres una persona fuerte y positiva, no dejes que el pesimismo entre a teñirlo todo, porque después resulta muy lento "limpiar" hasta conseguir eliminarlo.
No dejes que una capa de desengaño tape el brillo que tienes y que te ilumina a ti y a los que están a tu alrededor.

Love forever! De todos los tipos, formas y colores!!

Anónimo dijo...

Mi querida amiga,

Quizá no sea yo la más indicada para hablar de esa fantástica y complicada palabra amor, pero tus palabras me llenan de pena. Es cierto que las relaciones son complicadas, que las personas somos todavía más difíciles y que, en los tiempos que corren, tenemos el mal de la falta del compromiso y del respeto por los demás. A pesar de todo ello, siento comunicarte que todavía creo en ello, creo en el hecho de que dos personas se comuniquen con solo una mirada, que se echen de menos tanto que les duele, que sientan que sin el otro su vida no tiene sentido…que se sientan, en cierta forma, encadenados para siempre. El amor es algo tan grande, cuando se siente de verdad, que las palabras no puede expresar y que no somos capaces de controlar.

También es cierto que, tras las heridas, cuesta volver a confiar, a creer..a sentir, sin más. Como una vez me dijo una amiga que, para encontrar a mi Dorito, tendré que ver antes muchas Rufles…Moraleja: no te desanimes y, especialmente, no dejes de creer en algo que es intrínseco a tu personalidad. Toda tú irradias cariño, ternura…Nunca dejes de creer en aquello que te hace ser como eres porque entonces dejaras en creer en ti misma!

Un beso gordo desde el país vecino!

Anónimo dijo...

Vaya...Suena triste claro, pero la verdad es que yo cada vez pienso más cómo tú, y por supuesto dirán que como soy tan negativa es normal, pero yo soy negativa o la gente sigue empeñada en creer en un espejismo que nos hemos creado para tener una ilusión más a la que aferrarnos en la vida?
Creo en la pasión de los primeros momentos, en esa locura, cuando no conoces lo que te saca de quicio de la otra persona. A medida que pasa el tiempo, todo se va apagando y esa idea de principe/princesa azul que te habías montando en la cabeza cada vez se va disipando más en el camino. El amor se transforma con el tiempo...puede ser, de hecho creo que es así, pero deberíamos empezar a distinguir por nuestro bien lo que es amor, de lo que es costumbre, cariño u otra clase de amor, compañía o miedo a quedarse sólo. Y creo que con el tiempo lo que era amor loco se convierte en esto. Y desde luego, eso de estar locamente enamorado después de 20 años juntos....En fin! Que me llamen incrédula pero sigo pensando que es ciencia a ficción.
Ya sé que habrá gente que le parezca mal que piense así porque parece que tienes que pensar siempre que todo es color de rosa, aunque la realidad te salpique día a día en la cara, con tus propias experiencias o la experiencia de la gente cercana, pero es lo que yo creo y como ya me subieron a las nubes una vez y luego me caí de golpe, procuraré ser más realista la próxima vez!

Animo supernena! tú puedes con esto y más!!!